EL LIBRE EJERCICIO DEL TRABAJO SOCIAL

El trabajo social es una profesión con un amplio abanico de actividades profesionales por realizar. No obstante, al ser una profesión joven, el trabajador/a social se encuentra con el desconocimiento del cliente/usuario sobre los servicios que puede ofrecer. Y no sólo entre éste, sino también entre el resto de colegas.

La principal salida/ocupación que se suele ver a esta profesión es la pública, y normalmente encuadrada dentro del medio de actuación de los servicios sociales. La mayoría de las veces nos consideramos gestores de recursos, por ejemplo.

Pero en trabajo social, el principal recurso que le podemos ofrecer somos nosotros mismos como profesionales.

La socioterapia, las consultas a empresas particulares, el asesoramiento a familias a domicilio, etc. Existen multitud de servicios y tareas que podemos desarrollar, dentro del trabajo social.

El libre ejercicio profesional, desarrollado en otras profesiones y muy legitimado por el cliente/usuario, como el libre ejercicio de la abogacía o el de la psicología, no lo está en absoluto en trabajo social en nuestro país.

Se trata, el libre ejercicio, de ejercer la profesión como una empresa particular y privada en aquellos ámbitos y hacia aquellos clientes/usuarios a los que queramos dirigirnos. Laboralmente, al realizarse de manera individual, entra dentro de la figura del trabajador/a autónomo.